lunes, 25 de febrero de 2013

MARATÓN DEL ESPADÁN 24 F / 42 KM -

Durante toda la semana vi acercarse el día, más pensando en que el tren que pasa por la puerta del instituto, trajera la deseada compañía, que por el propio día del maratón.
Iba acercándose el famoso día 24 de Febrero en el que 42 km (capicúa), me esperaban para ponerme a prueba una vez más. Toda la planificación de medio año, para jugármela en un día. Así es el deporte, tanto para el que planifica como para el que corre, que en este caso (dicho sea de paso) coinciden.
¿El objetivo? sólo uno. El mismo de siempre. Abacar entera y disfrutando.

Cuando llegó el viernes, llegó con él la ola de frío, el tren con Davi y el respetado fin de semana del día 24 F-42km.
Pasamos el sábado tratando de no pensar mucho en lo que traía el domingo. Frío, viento, y muchos pasitos. Hicimos turísmo por el Delta del Ebro, descubrimos Amposta,  huimos de las inclemencias meteorológicas en casa, y hasta nos permitimos degustar y compartir chocolatinas varias (hacer carga de hidratos), con las piernas en alto y frente a una buena película. ("Hacia rutas salvajes").

22.00 PM. Toque de queda. 5.00 AM . Toque de Diana. Tengo que desayunar, pero... no me entra nada. 5. 30 AM. Las tostadas me miran y yo a ellas. 5.45 AM. Llamo a Davi y me las envuelvo para el camino. Emprendemos camino hacia Segorbe.
Durante el trayecto, tomo conciencia. Vistas las previsiones del tiempo y hoy con 18º menos que ayer... no tengo ganas...

Tras aparcar en el pueblo y tomarnos algo caliente, suena el móvil. ¡¡Rubén!! ¡¡ ya están aquí!! bien... Cambia la energía y poco a poco vuelven las ganas.
9.00 AM. Salimos de los últimos, muy tranquilos, reservando, conversando...
Km 17... siempre hay grupos delante marcando el ritmo, empiezo a agobiarme al no poder pasar...
Km 21... ya llevamos la Media Maratón y no he sufrido NADA. La carrera se pone cuesta arriba y veo que quiero avanzar, ponerme a prueba...quiero tirar.
Miro varias veces atrás y veo que Rubén sigue teniendo gente que le impide el avance... no sé que hacer. En el llano me cogerá, pienso... (como siempre). Voy a apretar bajando... Me quito el tumulto y miro en varias ocasiones buscando a Rubén, pero pronto entiendo que...no ha podido pasar.

Durante el desfogue, feliz de no tener nadie delante, me topo con Vicente, va caminando... algo pasa. Entiendo que la rodilla no le va bien, y le pregunto que si quiere comida, me dice que no, y sigo.

Km 30, comienzo a sufrir un poco. Del 33 hasta el 35Km me veo cansada, con letargo, con sueño...creo que llega la hipogluciemia, y con ella el avituallamiento, menos mal...bebo y como. Me voy recuperando.
37-39km del tirón. 39-41Km del tirón, ni me entero...ahora que voy bien, la cosa se acaba. 42km...meta y mucha hambre, es lo único que siento. Hambre, ni más, ni menos.

Miro atrás y a penas recuerdo 10 imagenes de la carrera. Aún estoy ausente, en carrera, concentrada...
Veo a Davi en meta y a Vicente ya recuperado, respiro. Paco está con él y me doy cuenta de que no estoy contenta. Cuando tomo conciencia de verdad...no veo motivo para estarlo, tenia que haberme quedado con él, al menos hasta que alguien de la organización se quedase a su lado. He conseguido mi objetivo, pero internamente estoy poco contenta de mi falta de atención. Amigo Vicente, lo siento, y espero que la gripe, se quedara en el Pico.

Con los kilómetros, se pierde perspectiva, pero con la competición más.  Al final, como siempre, después de tanto correr, cuando paro es cuando aprendo. En fin...gajes del oficio.





1 comentario:

miguelflor dijo...

Bea no te comas mucho el coco con eso, seguramente valoraste mal la situación pensando que se recuperaría pero intuyo que tampoco lo pasaría tan mal tu amigo y al final lo que cuenta y seguro que el lo querría así es que disfrutaras de la carrera.

Enhorabuena por esa maratón que te has echado al bolsillo, una buen entreno para ponerte fuertota.

Pronto nos vemos, cuídate.